Corre fuerte el rumor de que la española Rosalía cobró 10 millones de pesos por cantar el pasado viernes 28 de abril en el Zócalo de la Ciudad de México, en un concierto al que esperaban más de 200 mil asistentes, número que ni en sueños se pudo llegar a lograr.
Y es que de la noche a la mañana se empezó a especular que no venía de a gratis a cantar luego de la petición hecha por Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno. Lo cierto es que trascendió que el equipo de la artista solicitó una reunión para hacer el “pliego petitorio” de todo lo que requería para lograr esta presentación (viáticos, hospedaje, boletos de avión en primera clase para la cantante, sus músicos y sus bailarines, así como todo el staff), además de una cuantiosa suma (aseguran que llegó a los 10 millones de pesos) para los “gastos” de la artista que por supuesto “no eran” el cobro por la presentación. Claro que la cantidad iba libre de impuestos y hay quien dice que se entregó peso por peso en efectivo.
El equipo de La Motomami informó que Rosalía cerraría con broche de oro su gira por el continente Americano como parte de su “Motomami World Tour”, asegurando que la intérprete de “Bizcochito” no cobraría ni un solo centavo con el fin de fomentar la cultura y esparcimiento de la música en nuestro país.
La pregunta sería ¿quién le pidió a una catalana convertirse en promotora de la cultura y esparcimiento de la música en México? Y no solo era el pago, pues para un concierto hay muchas otras cosas a considerar como el montaje que va desde el escenario, el rider, las enormes pantallas colocadas en el escenario, etc.… un montaje como este tiene un costo aproximado de un millón de pesos.
Para qué se justifican
Por tal razón la empresa OCESA decidió emitir un comunicado en el que aseguró que el concierto sería totalmente gratuito. Pero dicen por ahí que “a explicación no pedida, acusación manifiesto” y es bien cierto, pues es la primera vez que esta empresa se manifiesta dando explicaciones publicando un comunicado de esta clase en el que a todas luces se quiere demostrar que nada de lo dicho por los rumores es cierto.
El Gobierno Capitalino fue acusado de buscar hacer proselitismo con esta presentación y en muchas plataformas trascendió que el pago de los 10 millones saldría de recursos públicos. No cesaron las quejas, manifestaciones y comentarios sobre el asunto pidiendo que mejor este dinero se utilizara en inversiones para mejores escuelas públicas, parques y por supuesto que se invierta en el Metro de la CDMX tan deteriorado por el tiempo y la falta de mantenimiento.
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Pan y circo para el pueblo
“Cortina de humo”, o como suelan llamarlo, varios medios apuntaron que mientras Rosalía cantaba en el Zócalo, a unas cuantas cuadras los Senadores de Morena se reunieron para aprobar una ley cada diez minutos. Lo más curioso del caso es que ocurrió en un viernes, en fin de semana y justo en puente, lo que “si no es, parece” pues resulta poco creíble que situaciones como esta ocurran como por “arte de magia” y que esta ralea se aplique a trabajar.
No es extraño que Rosalía haya aceptado esta invitación al Zócalo por la Jefa de Gobierno pues si bien en una parte había el interés económico, en otra sabía bien las implicaciones políticas que había en todo el asunto y a ella al parecer le gusta este mundillo.
Se sabe que Rosalía ha tenido manifestaciones políticas a través de sus redes sociales como ocurrió en el 2019 en las que apenas puso dos palabras “Fick Vox”, haciendo referencia a la formación liderada por Santiago Abascal allá en su país natal. Se dice que la cantante es “libertaria” pues en el video clip “Yo por ti tú por mi” aparece con un pantalón amarillo en el que lleva la bandera de Gadsden un símbolo de la corriente libertaria.
Afirman que Rosalía exhortó a los mexicanos a pedir el voto masivo por Morena para el 2024, nunca se verificó la verdad de los mensajes, pero queda en la conciencia popular y como dicen “de la calumnia, algo queda”.
Fans de Rosalía inconformes
Inconformes y molestos, los seguidores de Rosalía se manifestaron en las redes sociales, entre las muchas cosas que se dijeron fue que había boletos en venta hasta por 5000 mil pesos, que se les impidió circular en diversas áreas del Zócalo ya que había zonas restringidas para “VIP´s”. Hubo quien se plantó en la Plaza de la Constitución desde casi un día antes para tener el privilegio de verla de cerca. La gran decepción fue que el concierto apenas duró 70 minutos: “llegó tarde y se fue sin despedirse”.
Famosos que sí han llenado el Zócalo
Vale la pena recordar quienes, si han logrado grandes audiencias en el Zócalo, quedando La Motomami en un séptimo lugar:
Grupo Firme 280,000
Vicente Fernández 217,000
Shakira 210,000
Paul McCartney con 200,000
Justin Bieber 200,000
Café Tacvba 170,000
Rosalía 160,000 almas
Chayanne con 145,000
Los Tigres del Norte con 140,000
Y para ser honestos ya va siendo hora de que nuestros dirigentes dejen de lado estas intenciones de ganar votos e intentar “jalar agua para su molino” pues estos conciertitos nos están saliendo caros. Dicen que Maluma ya se invitó al Zócalo y el precio que hay que pagar es de 400 mil euros, mientras que Bad Bunny cobra por presentación medio millón de dólares…
En serio…, no queremos más música cara y mucho menos artistas de segunda, pues de todas maneras el talento y el carisma de estos politiquillos anda por los suelos.