Miguel Bosé estuvo como invitado en el programa “El Hormiguero”, conducido por Pablo Motos, donde se disculpó por no haber acudido en la primera fecha que pactaron, debido a un problema de salud, que atribuyó a que 10 encapuchados asaltaron su casa de la CDMX hace un mes.
“Pido perdón, excusas, a todo el equipo, a ti y a la gente. La última vez que tuve que haber venido no pude porque me puse muy enfermo. Estábamos dormidos en mi casa y de repente me despierta alguien. Miro, veo caras que no conozco y estaba encañonado con una pistola. Estábamos todos rodeados de gente armada hasta los dientes con metralletas y artillería pesada muy grande”, recordó sobre el asalto a su casa.
Agregó que, a pesar de ello, los ladrones no eran profesionales por su modus operandi, pues en ningún momento hubo violencia física contra ninguno de ellos, aunque si desnudaron y ataron a los vigilantes de seguridad, y hasta les recomendó que para evitar que separaran a sus dos hijos que se encontraban con él en la casa e instó a los maleantes a que los aislaran junto con la empleada del hogar.
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Miguel Bosé: “El jefe se quitó la máscara y me dijo que era mi fan, otro miembro de la banda me pidió una selfi”
Mientras sus hijos se quedaron atados en una habitación y los cubrieron para que no pudieran ver, Miguel Bosé fue con los ladrones para abrirles las cajas fuertes y darles todo lo de valor.
“A un determinado momento, se me queda el jefe mirando y dice: ‘Chavos, es Miguel Bosé’. Se quitó la máscara y me dijo que era mi fan. Yo le dije que entonces teníamos que llevar las cosas por buen camino o se acababan los conciertos. Incluso un miembro de la banda me pidió una selfi”.
Agradece a los ladrones
Bosé comentó que los ladrones se llevaron “todo lo que pillaron” y admite que pudo haber sido peor, pero les agradece que se hayan llevado los objetos que dos amigas californianas le regalan y que él detesta.
“Desde aquí quiero agradecerles una cosa. Tengo dos amigas californianas fans de toda la vida que cada Navidad, cumpleaños o fiesta me regalan objetos que a ellas les apasionan y yo detesto. Una gama alta de maletas y monederos. Pues se las llevaron todas, así que muchas gracias”, bromeó después del susto que se llevaron sus dos hijos y él.
Después del paso de los ladrones, Miguel Bosé estuvo con la casa completamente desordenada durante 3 días hasta que llegó la Policía, que, según él, fueron casi peores ellos que el atraco.
“Fueron casi peores ellos que el atraco. Tenían muy buena voluntad, pero eran 30 y estaban más armados que los otros. Es un suceso para olvidar lo antes posible”, concluyó.