Todos, ajenos o no al mundo de la moda, siguen hablando de una sola cosa: la pasarela de Balenciaga en París. Y es que no es para menos, Demna Gvasalia, diseñador de la casa de modas, ha logrado lo que muy pocos han podido, deleitar con su propuesta de moda al mundo entero.
Un nuevo capítulo
No es para menos tanto alboroto, la casa Balenciaga vuelve a las grandes ligas del mundo de la moda con su retorno a las pasarelas de Haute Couture, luego de 53 años, cuando su fundador, el español Cristóbal Balenciaga decidió suspender sus colecciones en estos desfiles.
Ahora, con esta segunda colección, el regreso de Balenciaga al mundo de la alta costura no ha dejado indiferente al público, más allá de las modelos invitadas, entre ellas, varias celebridades, como Naomi Campbell, Nicole Kidman, Dua Lipa, Bella Hadid o la polémica Kim Kardashian.
En contraste
Un total de 59 salidas conforman la propuesta 51th Couture Collection de Balenciaga a cargo de Demna Gvasalia, que combina piezas elegantes con algunas otras más irreverentes, con toques futuristas y una dosis exacta de extravagancia, que tanto ha caracterizado en los últimos años a la firma.
La primera parte de la entrega está conformada por piezas ceñidas al cuerpo confeccionadas en neopreno, como trajes de buzo, que asemejan la silueta de los jumpsuits convencionales; vestidos, gabardinas, faldas y trajes, todos en color negro.
Otros diseños fueron creados en piel, igual en color negro, como pantalones, chamarras de corte western, vestidos, bomber jackets y algunos accesorios, como cinturones y guantes.
Los modelos, además, lucieron el rostro tapado por una máscara de aires futuristas.
El detalle que no pasó desapercibido en esta parte de la colección fueron los accesorios, entre ellos los relojes que fueron usados como pendientes, los diseños del calzado puntiagudo de goma y los bolsos, que además son bocinas que la firma creó en colaboración con Bang & Olufsen, que sirven como altavoces portátiles.
Jeans de lujo
Otra línea dentro de la propuesta de Balenciaga son la inclusión de prendas confeccionadas en tela de mezclilla. En contraste con la primera parte de la colección, donde la confección es más ceñida al cuerpo, en la ropa de denim es lo contrario, con piezas de gran amplitud, líneas más abiertas y siluetas oversized.
Los abrigos es otras de las fuertes apuestas de Demna Gvasalia para Balenciaga, pues presentó abrigos de grandes dimensiones, anudados a la cintura, en tonos navy, negros o en estampado de animal print, que combinó con pantalones tipo leggins deportivos muy al estilo aesthetic.
El resto de la colección incluye también sudaderas amplias o hoodies, bomber jackets, jerseys de cuello vuelto, gabardinas y una propuesta completa de maxi vestidos en sedas, tafeta, lana, organzas, terciopelo y textiles metálicos, como el polémico diseño que lució Nicole Kidman que se convirtió de los más polémicos y comentados en redes sociales.
La máxima protagonista de Balenciaga
Se trata de un diseño asimétrico drapeado confeccionado en tafeta de seda recubierta de plata con guantes altos, como todas las demás propuestas, y zapatillas de caucho brillante de aires futuristas.